En este artículo hablaremos de las sillas de ruedas posturales, son aquellas que aportan un gran confort al usuario, además de permitir una posición correcta que reduzca dolores de espalda y úlceras por presión.
Son sillas en las que podremos levantar las piernas y bascular el asiento, mejorando el retorno venoso y modificando los puntos de presión.
Trataremos aquí las sillas manuales, no las eléctricas y pondremos tres ejemplos, en nuestra opinión las que más nos gustan a nosotros y a nuestros usuarios.
Empezamos por las sillas de Invacare. Se trata de la generación Rea, los modelos Rea Clematis y Rea Azalea.
Rea Clematis es simplificando la versión económica de la Rea Azalea, esto se traduce en una versión menos configurable y materiales más pesados.
Ambas ofrecen la opción de ruedas autopropulsables o no autopropulsables, pero además la Azalea nos permite elegir distintos chasis para los usuarios de mayor o menor estatura, podremos además, elegir gran variedad de respaldos, de reposabrazos y reposapiés, tapizados e incluso colores del chasis.
El modelo Juditta de Ayudas Dinámicas, se trata de una silla con un diseño innovador y presenta unos estudios clínicos fantásticos a nivel de descarga de presiones.
Su material semi-elástico tanto del asiento como del respaldo además de su diseño, permiten aliviar la presión de la columna y el isquion, reduciendo la posibilidad de úlceras por presión. Como las Rea ofrece la opción de ruedas pequeñas para interior, o ruedas para exterior y autopropulsables.
A nivel económico se trata de un modelo de precio similar a la Azalea. Sillas de alta gama y prestaciones y acabados inmejorables. La seguridad social tiene un código propio para este tipo de sillas, indicado especialmente para aquellas personas con movilidad general muy limitada.